Hormona Antimülleriana

Ayuno de 8 horas

El personal del laboratorio le tomará una muestra de sangre de un brazo.

La hormona antimülleriana (AMH) es una glucoproteína producida por los folículos ováricos en desarrollo y desempeña un papel fundamental en la evaluación de la reserva ovárica. Su medición en un laboratorio clínico permite obtener información valiosa sobre la fertilidad femenina y la capacidad ovulatoria.

La hormona antimülleriana se ha convertido en un marcador esencial para determinar la cantidad de folículos disponibles en los ovarios. A diferencia de otros indicadores, como la hormona foliculoestimulante (FSH), cuyos niveles varían según el ciclo menstrual, la AMH presenta valores relativamente estables. Esto permite realizar la prueba en cualquier momento del ciclo sin que la fase en la que se encuentre la paciente afecte los resultados.

Una concentración baja de hormona antimülleriana sugiere una reducción en la cantidad de folículos ováricos, lo que podría indicar una menor probabilidad de concepción natural. Por otro lado, valores elevados pueden estar relacionados con patologías como el síndrome de ovario poliquístico (SOP).

La prueba de hormona antimülleriana se realiza mediante un análisis de sangre en un laboratorio clínico especializado. No requiere preparación previa ni ayuno, lo que la convierte en una prueba sencilla y accesible.

Los resultados del análisis deben ser interpretados por un médico, quien considerará otros factores, como la edad de la paciente y su historial médico. En conjunto con otras pruebas hormonales y ecografías, la AMH brinda una visión integral sobre la salud reproductiva de la mujer.

En conclusión, la hormona antimülleriana es una herramienta clave en la medicina reproductiva. Su estudio en un laboratorio clínico permite evaluar con precisión la reserva ovárica, facilitando la toma de decisiones sobre tratamientos de fertilidad o planificación familiar.